No hay mejor modo de narrar un misterio que dejarse llevar por la cronología de los hechos, más cuando ese enigma tiene que ver con algún secreto de Don Jorge Luis Borges
Hacia 1935, J L B, publica » Historia Universal de la Infamia» y quizá porque lo poco romántico del libro o porque cuando se ama ciegamente se puede demandar hasta lo infame, dicho libro aparece con la siguiente dedicatoria:
«Dedico este libro a I.J.: Inglesa, innumerable y un Ángel. Además: Le ofrezco ese núcleo de mí mismo que he salvado, de algún modo: ese corazón que no comercia con palabras, que no trafica con sueños, y que no ha sido tocado por el tiempo, por el júbilo, por las adversidades»
Casi 10 años después, esa dedicatoria se publica como verso de uno de los dos poemas (el que nombramos dos) Quizá la lejanía, el lapso impuesto por los años, permitieron expresar lo que antes era lo mudo de este amor aunque no el nombre de la destinataria.
Continua la letanía del tiempo y en 1954, otra edición, y estos poemas ahora llamados Two English Poems son dedicados a Beatriz Bibiloni Webster de Bullrich. Lo curioso que en el mismo año también aparecen dedicados a S.D, paradoja que se mantienen en la edición de las obras completas que el mismo Jorge Luis supervisó. I J ha quedado irremediablemente pérdida, metamorfoseada en otras pero inalcanzable.
Algunos dicen que I J era una dama inglesa casada, otros afirman que el lenguaje del amor merece secreto, entonces que mejor que extranjerizarlos.
Los mas ingenuos suponen que Borges revela la identidad y que IJ o SD era Betriz Bibiloni. Los Borgianos afirman que Betriz Bibiloni escondía con mas decisión a la dama misteriosa que como toda Beatriz , desde que nació Dante es sencillamente inalcanzable. Los mas entusiastas afirman que Borges cometió la torpeza de dedicarlo a distintas mujeres.
Quizá solo se deba a que todo nombre es cualquier nombre pero en su esencia es indescifrable o quizá que no haya modo de nombrar lo que amamos y que la búsqueda de un nombre sea mas arduo que escribir el poema.
Majo